A pesar de la localía y el gran ambiente, AFC Toronto perdió contra Montreal Roses por la mínima.El sábado, horas antes del encuentro, la emoción ya se sentía entre los 14,500 fanáticos que se congregaron en los alrededores del BMO Field para presenciar el debut del equipo.
Fue inevitable no sentir alegría por los pasos y el alcance que ha logrado el fútbol femenino. Los actos protocolarios conmovieron a muchos de los presentes, especialmente al ver las tribunas repletas de niñas y jóvenes que sueñan con algún día participar en este certamen y brillar en este hermoso deporte.
El partido comenzó, y no habíamos terminado de acomodarnos en nuestras sillas cuando, en el minuto 1, tras un mal pase de Katembo, la delantera de las Roses, Boychuck, aprovechó y definió de manera excelente, marcando el primer y único tanto del partido. Durante el primer tiempo, vimos cómo ambos equipos intentaban estructurarse y adaptarse al ritmo del rival. Las jugadoras de Toronto, aunque intentaban salir jugando desde atrás, perdían el balón con facilidad en la mitad del campo, lo que permitió a las Roses generar peligro constante en el arco rival. Fue un primer tiempo complicado para ambos conjuntos.
En el segundo tiempo, todo fue diferente. Se notó en AFC Toronto el estilo de juego que había anticipado su director técnico, Marco, el día anterior: velocidad y buena combinación entre jugadoras. En la mitad de la cancha, la capitana Emma Reagan y la centrocampista Victoria Pickett hicieron un gran trabajo liderando al equipo, atentas tanto al ataque como a la defensa. Okoronkwo y Ashouri brillaron por su velocidad y por la facilidad con la que evadían las marcas, aunque no tuvieron suerte al momento de rematar al arco.
La defensa de Montreal estuvo muy bien organizada y su arquera, Karpenko, salvó en repetidas ocasiones al equipo. Para mí, fue la jugadora del partido, ya que supo controlar los momentos de mayor presión con sus grandes atajadas. A pesar del gran esfuerzo del equipo local, no lograron concretar ninguna de sus oportunidades. Las visitantes, si bien se replegaron defensivamente, no dejaron de buscar el segundo gol mediante contragolpes rápidos.
El partido finalizó dejando en AFC Toronto un sabor agridulce por la derrota en casa, frente al imponente apoyo de sus fanáticos, que alentaron durante los 90 minutos. En la conferencia de prensa posterior al encuentro, la capitana Emma Reagan aseguró que esto es solo el comienzo y expresó su esperanza de seguir contando con el respaldo del público en el próximo partido, cuando visiten a las Ottawa Rapid el 27 de abril.